A través de un documento, militares que participaron en el 4F de 1992, entre ellos el ex gobernador de Mérida, Florencio Porras, solicitaron al presidente Nicolás Maduro que renuncie, «si definitivamente no puede cumplir los deberes que le corresponden por mandato constitucional».
«Nuestro país atraviesa una de las más críticas etapas de su historia republicana, crisis que se traduce en una peligrosa situación política, social, económica, cultural y ética. Las ideas propuestas en las rebeliones militares de 1992 con énfasis en la lucha contra la corrupción administrativa, colocar a las empresas básicas y estratégicas al servicio de la nación venezolana e impulsar un verdadero proceso constituyente, fueron desvirtuadas y desfiguradas», aseguraron los firmantes del documento.