Fue enterrado el policía asesinado cuando intentaba detener a dos rapiñeros

Era funcionario de la Guardia Republicana. Hay un sospechoso detenido.

Los restos de Eugenio Nicolás Otero, un policía que tenía 26 años y fue asesinado cuando intentó detener a dos rapiñeros, fueron sepultados a la tarde en el cementerio de Las Piedras.

El ministro del Interior Eduardo Bonomi, el director nacional de Policía Mario Layera y varios jerarcas de seguridad acompañaron a la familia y compañeros del joven cabo, padre de un niño de once meses.

El efectivo, era de la Guardia Republicana, estaba en la esquina de Batlle y Ordóñez y Behring en bicicleta cuando vio a dos hombres abordar a una pareja que bajaba de un ómnibus. Los ladrones le sacaron la cartera a la mujer y la billetera al hombre. De inmediato, el policía intervino y le dio la voz de alto a los delincuentes, que reaccionaron rápidamente y le dispararon. Él llegó a responder los balazos, pero cayó herido y murió en el lugar.

Más tarde, un patrullero encontró a pocas cuadras a un joven de 23 años con una herida de bala. Según la Jefatura de Montevideo, el perfil se ajusta a la descripción de los testigos y ahora esperan trasladarlo ante el juez.