Agentes de la Patrulla Fronteriza de Estados Unidos incautaron siete toneladas de marihuana y una de cocaína, que habían sido introducidas a través de un túnel subterráneo en la frontera con México.
El túnel, el más largo alguna vez descubierto entre California y México, se extendía casi 800 metros desde una casa en Tijuana hasta unas instalaciones industriales en San Diego, California.
El túnel estaba equipado con rieles y sistema de ventilación, además de luces y un elevador desde el pasadizo hasta un ropero al interior de una vivienda en el lado mexicano, detallaron las autoridades.
Hasta ahora seis personas han sido arrestadas por traficar drogas ilícitas y construir el túnel.
En los últimos cinco años, se han decomisado más de 75 túneles en las fronteras de California y Arizona.
