Suprema Corte consideró que la jueza “es indigna para el ejercicio del cargo” Denunciada por malos tratos, ausentarse de las audiencias sin motivo o incluso encerrarse en el baño.
La Suprema Corte de Justicia (SCJ) destituyó a una jueza del departamento de Treinta y Tres por mala conducta durante las audiencias y atrasos de hasta un año en el dictado de sentencias, entre otros motivos que llevaron a calificarla como “indigna para el ejercicio del cargo”, según la resolución a la que accedió Subrayado.
“Demostró ser indigna para el ejercicio de un cargo como lo es el de la magistratura, quedando ampliamente demostrado no estar a la altura”, dice la resolución de la Suprema Corte, sobre la jueza letrada de primera instancia de Treinta y Tres Ivanna Marcela Combe Santos.
El sumario a la magistrada se inició en febrero de 2024, cuando se la separó del cargo y se retuvo medio sueldo durante tres meses. En mayo se prorrogó el sumario por tres meses más con la misma medida cautelar: separación del cargo y retención de medio sueldo.
Finalmente, el 7 octubre de 2024 la Corte toma la resolución de destituir a la jueza Combe Santos.
Las denuncias contra la magistrada fueron realizadas por el Colegio de Abogados de Treinta y Tres, por abogados de oficio del departamento, por actuarias que trabajaban en su oficina y por inspectoras que presentaron informes para el sumario.
Las primeras denuncias referían al atraso, injustificado para la Suprema Corte (en algunos casos de hasta un año) en el dictado de sentencias, lo que perjudicaba a denunciantes e indagados.
Hubo una “dilación indebida y contumaz de la magistrada en expedirse”, concluye la Corte.
El atraso de los expedientes se contaba por centenares, y algunos fueron hallados en el domicilio de la magistrada.
Otra irregularidad detectada fue la derivación de expedientes a las actuarias para resoluciones que solo le competen al juez.
En su defensa, la magistrada sumariada dijo que el atraso venía desde el año 2021 y que por la acumulación de casos no le daba el tiempo para ponerse al día. Además indicó problemas de salud que la llevaron a tomar largos períodos de licencia médica.
La Corte consideró injustificados estos atrasos y señaló que aún con los problemas de salud que pudiera tener, debió adoptar medidas para evitar la acumulación de expedientes sin resolución.
Malos tratos en las audiencias
Abogados y funcionarios denunciaron también que la jueza comenzaba las audiencias con varias horas de atraso o directamente se ausentaba sin explicación ni justificación alguna.
También señalaron que había malos tratos de parte de la magistrada durante las audiencias, y reiteradas “salidas al baño”.
Varios de los abogados interrogados durante el sumario dijeron que la jueza se iba al baño y desde allí les gritaba que siguieran con la audiencia, que ella escuchaba desde el baño.
Una abogada defensor dijo a la instructora del sumario: “Desde la sala de audiencia escuchábamos sonidos raros de la nariz, pero no eran estornudos, era como si estuviera aspirando algo. Al retornar a la sala se le notaba claramente el cambio de actitud. Venía eufórica, hablando a veces sin sentido”.
Otro testimonio recogido en el sumario y que cita textual la resolución de la Suprema Corte, dice: “Más de una vez me pidió ayuda para decretar porque no estaba en condiciones”.
El sumario también cita a un abogado que manifestaba la preocupación de su cliente: “¿Esta es la persona que va a resolver sobre mi vida? Está borracha o drogada”.
Otros testimonios incluidos en el sumario y en la resolución de la Corte dan cuenta de que a veces la magistrada se iba de la audiencia sin aviso y no volvía, o lo hacía a la media hora. También denuncian que habla de “temas personales” en la audiencia y “hacía chistes malos”. Incluso, dicen los testimonios de abogados y funcionarios “lloraba en la audiencia”.
El abogado que representó a la jueza en el sumario alegó que la magistrada estaba en tratamiento psiquiátrico y tomaba fármacos. La propia jueza dijo que tenía “estrés emocional debido a dolencia de índole neurológica”.
Destitución
La Suprema Corte de Justicia dispuso entones la destitución por “atrasos y dilaciones en sentencias, remisión inadecuada de expedientes a la actuaria y conducta ética inadecuada en el desempeño de su función”.
“Demostró ser indigna para el ejercicio de un cargo como lo es el de la magistratura, quedando ampliamente demostrado no estar a la altura”, dice la resolución.
Informe de Subrayado